I.G.P. Castilla y León. Abadia Retuerta 2015

IGP VINO DE LA TIERRA DE CASTILLA Y LEON

Delimitación geográfica: La zona de producción de los vinos amparados por esta I.G.P. está formada por la totalidad de los municipios de la Comunidad Autónoma de Castilla y León. Las bodegas, debido a la forma en que elaboran sus vinos, no están adscritas a ninguna otra Denominación de Origen. Castilla y León está formada por una meseta con ligera inclinación E-O, rodeada de sistemas montañosos: al Norte, la Cordillera Cantábrica; al Noreste, el Sistema Ibérico; al Sur, el Sistema Central y al Noroeste, los Montes de León. Esta configuración geográfica le otorga un cierto aislamiento interior, marcado por la altitud (más del 98% de su territorio está por encima de 600 m) y protección que le brindan los sistemas montañosos.

Creación y Superficie: Creada en el año 2000 para verificar la calidad de los vinos no pertenecientes a las D.O. aledañas de Ribera del Duero, Cigales, Rueda, Toro y el Bierzo, representa el 6% del viñedo español.

Prácticas enológicas: Prensado necesario para que el rendimiento no sea superior a 75 litros de vino por cada 100 kilogramos de vendimia. Los rendimientos máximos admitidos serán de 16.000 kilogramos de uva por hectárea de superficie, tanto para variedades blancas, como tintas, no pudiendo obtenerse más de 120 hectólitros de vino por hectárea.

Variedades principales de uva: Albillo Real, Viura, Verdejo, Sauvignon blanc, Albarín, Godello y Albariño, para uvas blancas y Garnacha Tinta, Juan García, Mencía, Prieto Picudo, Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Rufete, o Syrah para las uvas tintas.

Clima y suelos: El clima predominante en Castilla y León es de tipo Mediterráneo, semiárido, continental, caracterizado por unos inviernos largos y fríos y unos veranos cortos, cálidos y secos. Mantiene un régimen de precipitaciones escasas y desigualmente repartidas a lo largo del año, así como un extenso periodo de heladas frecuentemente tardías así como con marcadas oscilaciones térmicas entre el verano y el invierno y entre el día y la noche. Se dan también algunos microclimas como ocurre en las Comarcas de El Bierzo, las Arribes del Duero o la Sierra de Salamanca, todas ellas con un clima menos extremo, más húmedo y cálido.

Los suelos de Castilla y León presentan diferentes características, en función de zona: así, en zonas de montaña, los suelos son húmicos, buenos para el aprovechamiento forestal y ganadero. Sin embargo son suelos de carácter ácido aquellos que se sitúan en la parte Oeste y Suroeste de la Región. Y finalmente, la Depresión del Duero, que es la zona agrícola por excelencia, es aquella donde se localizan los páramos, campiñas y vegas.

Productos: La zona da lugar a vinos blancos jóvenes, frescos y afrutados, con gran presencia en boca. Se diferencian de las elaboraciones de otras regiones los vinos rosados, especialmente los que se elaboran en las zonas tradicionales. Son frescos, con aroma a frutas rojas y con un agradable paso de boca. Si son de Prieto Picudo resultan muy especiales, con un importante cuerpo y recuerdo frutal en vía retronasal. Los vinos tintos son potentes, con aromas a fruta madura, gran índice colorante, buena estructura y gran capacidad para crianzas largas. También destacamos sus vinos espumosos, de aguja así como los vinos de licor y de uva sobremaduras.

Bodegas Representativas: De muy alta calidad y grandes referentes del vino español también a nivel internacional, como son Abadía Retuerta, Bodegas Mauro, Bodegas Ossian, y Quinta Sardonia entre otras.

CATA DE VINO: ABADIA RETUERTA SELECCION 2015.

Para realizar la cata, he seleccionado un vino al que tengo especial cariño desde que lo probé, hace ya bastante tiempo, y al que mantengo como una referencia imprescindible de catar año tras año. Mi primera incursión en el mundo del vino fue a través de un curso de cata que me regalaron y en el que tuve la oportunidad de probar un vino de estas mismas bodegas aunque algo más sencillo (Rívola), pero que me permitió descubrir esta IGP y dar posteriormente el salto a este vino de alta calidad.

Procedente de parcelas en Sardón de Duero anexas a las de la famosa bodega Vega Sicilia (DO de Ribera del Duero) se hizo famosa su añada 2001 por ser premiada en el International Wine Challenge de Londres de 2005 como el Mejor Tinto del Mundo. Tiene en su composición 66% Tempranillo, 24% Cabernet Sauvignon, 8% Syrah, 2% Merlot y una crianza en barricas de roble nuevas de 12 meses.

Esta añada de 2015 que ahora probamos fue un poco complicada. Durante otoño e invierno se registró una pluviometría tan alta que provocó que la capa freática llegase a su máxima capacidad. Hubo importantes variaciones con heladas nocturnas, que obligaron a tomar medidas anti-heladas en el viñedo. Pese a todo, no hubo enfermedades graves en la viña.

CATA: Hacía tiempo que no me ocurría dado que suelo adquirir las botellas en establecimientos fiables y siempre verifico la botella antes de comprarla. Sin embargo, en esta ocasión, debí comprarla fuera de mis círculos habituales y la botella tenía defecto, debido probablemente a un incorrecto estado de conservación.

Pasamos a describir las tres fases de la cata: Vista, Olfato y Gusto, previa descripción de botella y corcho. Cata realizada en catavino estándar.

La botella: Tipo bordelesa, elegante, troquelada con el escudo de la bodega, muy buena presentación con gollete muy firme. Etiqueta descriptiva respecto a las variedades que componen el vino y los tiempos mínimo de crianza, referente a su vinificación.

El corcho: Buen corcho natural, de una sola pieza, largo, de buena calidad. Aquí es donde detecté que la cata ya no iba a ser la que esperaba, con la consiguiente desilusión. Se podía apreciar una salida de vino debido, probablemente, a una exposición a temperatura excesiva en algún momento de su almacenamiento. Debido al gollete tan unido a la botella, no era detectable a simple vista.

Vista: Rojo picota con borde cereza, limpio, sin brillo. Capa media- alta. Tiene lágrima abundante (Grado: 14,5% vol.).

Nariz: A copa parada se perciben aromas a fruta roja madura, a tabaco y ahumado, herbáceos. En movimiento, aparece levemente picante, dulzón y especiado. No es un aroma representativo de este vino.

Boca: Me resulta desequilibrado, un poco dulce, sobresale el alcohol, picante en paladar. No tiene un sabor agradable, pero tampoco como para desecharlo. De hecho, lo acompañamos con unas costillas asadas y pudimos compensar parcialmente la desilusión inicial.

Conclusión: En resumen, una verdadera pena de cata porque tened por seguro que se trata de un vino de largo disfrute. Añado la ficha de cata oficial de la bodega dado que, pese a la mala suerte de esta ocasión, es un vino totalmente recomendable que no debéis dejar de probar. Precio de producto (20-25 €)

Enlaces de Interés

https://www.abadia-retuerta.com/wp-content/uploads/2015/07/Abadia-Retuerta-Seleccion-Especial-2015-2.pdf

https://www.abadia-retuerta.com